Small Caps vs Larga Caps. Luis de Blas
Hemos experimentado una considerable actividad en la venta del fondo en los últimos meses debido a nuestra creencia en la existencia de una oportunidad significativa en el ámbito de las pequeñas y medianas empresas europeas, que es la principal área de inversión de nuestro fondo.
Desde principios de 2022, el índice de pequeñas y medianas empresas europeas ha mostrado un rendimiento un 20% inferior al del Eurostoxx 50, una comparativa aún más pronunciada si la comparamos con el Nasdaq. Mientras que el S&P y el Eurostoxx 50 se acercan a sus niveles máximos, el índice de pequeñas empresas europeas aún se encuentra un 25% por debajo de sus máximos. En nuestro universo de empresas, aún no se ha producido una recuperación comparable a la observada en las grandes empresas, lo cual ha llevado a que los múltiplos se sitúen en torno a 13 veces las ganancias (en comparación con los múltiplos históricos de alrededor de 20x), en contraste con las 20x del S&P y en línea con el Eurostoxx 50 (aunque históricamente siempre ha cotizado con una prima significativa). Nuestra cartera se encuentra cotizando a múltiplos similares a los índices de empresas pequeñas, pero sin deuda (en comparación con la 1,8 veces deuda neta/EBITDA del índice) y con un crecimiento del 20% (en comparación con el 10% del índice).
Consideramos que esta oportunidad se ha presentado debido a dos factores: 1) la falta de liquidez en el sector, lo cual está generando una menor eficiencia en el mecanismo de fijación de precios; y 2) el notable aumento de los tipos de interés, que afecta tanto a las tasas de descuento como a los múltiplos y los costos financieros de las empresas, y, por ende, a las ganancias por acción (BPA).
Independientemente del descuento histórico al que cotiza el sector, siempre hemos sostenido que la inversión en empresas pequeñas es interesante en comparación con las grandes, por las siguientes razones:
Mayor potencial de crecimiento: esto se debe a la propia ley de los grandes números, según la cual, cuanto más pequeña es una empresa, más fácil resulta para ella experimentar un crecimiento significativo.
Un mercado menos eficiente, con menor disponibilidad de información, donde la falta de liquidez en entornos complicados como el actual puede brindar grandes oportunidades.
Ya observamos un comportamiento similar por parte de las pequeñas y medianas empresas durante la crisis de 2008, cuando su rendimiento fue un 23% inferior al de los índices. Los períodos de mercado muy adversos, en los que la liquidez escasea, suelen ser desafiantes para nuestro universo de inversión. No obstante, gradualmente, a medida que la liquidez regresa y los mercados comienzan a corregir las caídas, las empresas pequeñas vuelven a brillar.
Reiteramos que no podemos predecir cuándo ocurrirá esto, pero apostamos a que en los próximos años las empresas pequeñas volverán a destacarse, lo cual representa un momento excepcional para posicionarse en un segmento de mercado.
Pulsa para leer nuestra publicación en Linkedin