La renta variable es la denominación utilizada para referirse a la inversión en acciones de empresas cotizadas. Como su nombre bien indica, los precios de las acciones varían a diario, por lo que el inversor debe tener en cuenta que el dinero que destine a este tipo de activo se moverá a diario y puede tener un riesgo y una volatilidad elevada, pero también una rentabilidad elevada.